CERVEZA Y FÚTBOL: SIMBIOSIS PERFECTA

CERVEZA Y FÚTBOL: SIMBIOSIS PERFECTA

Las bases reglamentarias para el fútbol que conocemos hoy fueron establecidas tomando cerveza por un grupo de jóvenes en el bar “Freemason´s Tavern” de Londres, Inglaterra, el 26 de octubre de 1863, marcando la fecha clave en la que se inició la relación eterna entre cerveza y fútbol. Once representantes de sociedades y universidades pioneras del fútbol se reunieron para fundar la Football Association reglamentando también que sean once los jugadores en cada equipo.

El fútbol y la cerveza estuvieron siempre muy relacionados al mundo obrero del Reino Unido. Estilos como Porter, Stout y las cervezas de sesión nacieron por la demanda de obreros y cargadores de los puertos (porters).

En esos tiempos, como se sigue haciendo en muchos lugares hasta ahora, la gente se juntaba en la cancha con cerveza en mano para apasionarse por su equipo favorito. Con la llegada de la televisión, el fútbol pasó a la pantalla y en casas y bares como el de ITNOB los hinchas se abrazan, se angustian y gritan goles munidos de su cerveza.

BENEFICIO MÚTUO

Hay estudios que aseguran que el 80% de los aficionados que se instalan a ver un partido de fútbol lo hacen agarrados a una cerveza; los bares incrementan sus ventas en un 99% durante el horario de los partidos; dos de cada 3 euros gastados por los hinchas se destinan a la cerveza. Todo esto permite afirmar que todo futbolero es cervecero.

La cerveza y el fútbol representan una simbiosis, una asociación íntima de entidades para beneficiarse mutuamente que involucra cuantiosas sumas económicas. La cerveza es patrocinadora de equipos de futbol, inyectándoles millones de dólares a cambio de grandes posicionamientos de marca. 

Este relacionamiento llega a refinamientos exquisitos como el del estadio Velti Arena en Alemania, cuyos bares cerveceros están interconectados por una tubería de 5 kilómetros con sótanos de enfriamiento que guardan hasta 52 mil litros, mientras que la cañería transporta 14 litros de cerveza por minuto.

O como en el nuevo estadio del Tottenham en el que es posible servir cerveza desde la parte de abajo del vaso, colocándolo sobre una base en donde el vaso hace clic y se llena de abajo hacia arriba desde los barriles. ¡Aleluma!

UN BUEN PACK

La simbiosis cerveza-fútbol también es un negocio millonario a través de las estrellas futbolísticas de hoy y siempre como la cerveza mexicana en honor a Maradona llamada -10 Maradó- o las latas de varios países con los rostros de sus seleccionados y las de edición limitada de Budweiser con los rostros de Lionel Messi y Arturo Vidal para la campaña “Be a King”.

Las derrotas futbolísticas también implican pérdidas millonarias en venta de cerveza. Sólo es cuestión de imaginar cuánto se hubieran multiplicado estas ventas en nuestro país si Bolivia fuera parte del Mundial de Qatar.

La simbiosis cerveza- fútbol plantea dilemas complejos como el de definir si se permite su consumo dentro de estadios o a determinada distancia u horario. Para el campeonato mundial de fútbol en Qatar el problema se hizo más agudo al ser un país con severas restricciones de consumo de alcohol.

Esto es difícil de entender si se toma en cuenta que involucra inversiones cuantiosas de tradicionales patrocinadores cerveceros como Heineken y Budweiser. Esta última se ha mantenido fuertemente ligada a la FIFA desde hace más de 30 años, resquebrajándose esta relación con el Mundial de Qatar 2022 en el que sólo podrá vender refrescos y cervezas sin alcohol alrededor y dentro de los estadios.

Pero algo que debe resaltarse de esta circunstancia provocada por el Mundial de Qatar es el gran valor que tiene la cerveza sin alcohol, incomprendido por la mayoría del público que carece de cultura cervecera. Muchas personas no comprenden la gracia de una cerveza sin alcohol y esto se debe a la cerveza sin sabor difundida por la industria cervecera cuyo producto está principalmente enfocado a provocar embriaguez.

LA CERVEZA SIN ALCOHOL

Si se aprecia la verdadera cerveza por su sabor, es de menor importancia que contenga poco o ningún alcohol. Pero es difícil concebir esto si toda la vida se ha tomado cerveza sin sabor. Y lo triste es que en Qatar tomarán una cerveza sin alcohol…y sin sabor.

La cerveza sin alcohol se creó el 1919 con el nombre de “near beer” (era “casi” una cerveza) y durante la Ley Seca de Estados Unidos (1919 – 1933) era la única cerveza que se podía producir y vender. No podía contener más de un 0,5% de graduación alcohólica.

En base a la normativa actualmente vigente en la Unión Europea, la cerveza sin alcohol puede tener hasta un 1% de graduación alcohólica. Una verdadera cerveza sin alcohol, una 0,0, tiene una graduación alcohólica máxima de 0,04% siendo costosa de fabricar ya que se hace como cualquier cerveza, fermentando la malta, y después debe extraerse el alcohol cuidadosamente para no alterar los sabores, que es lo que busca el que verdaderamente aprecia una cerveza bien hecha.

Si eres parte del movimiento de cultura cervecera del ITNoB, amplía tu mente a priorizar más los sabores, colores y olores que los alcoholes.

Desde hoy, puedes disfrutar de Un Mundial In The Name of Beer en nuestro bar de autoservicio adquiriendo cualquiera de los Day Pass o VIP Pass aquí.

Publicación más antigua
Publicación más reciente

Dejar un comentario

Por favor tenga en cuenta que los comentarios deben ser aprobados antes de ser publicados

Cerrar (esc)

boletín cervecero

¡Empieza a descubrir la cerveza artesanal boliviana! Se el primero en enterarte de cervezas exclusivas, ofertas especiales y cultura cervecera.

Age verification

By clicking enter you are verifying that you are old enough to consume alcohol.

Buscar

Menú principal

Su carrito actualmente está vacío.
Empezar a comprar